Mi llegada al mundo de la prensa alternativa pasó por la literatura, el cine, el teatro y la política, una mezcla de situaciones donde se empieza escribiendo poesía, cuentos, ensayos y manifiestos, a la vez que se milita en el movimiento universitario.
Bajo ese influjo de experiencias, lo que en un momento fue poesía se convirtió en comunicados, luego en edición de videos y, finalmente, en documentales, hasta que de esa amalgama terminé mutando en periodista.
Poco
queda de cine
y literatura
que no sean tertulias, amanecidas y licor. Pero no se puede ser desagradecido.
Artículos como ‘Danilo alias Danilo: ¡Qué guion tan malo!’, ‘Sin entrevistar a Robinson 22 en la X Conferencia de las FARC’ y documentales
como ‘Memoria y dignidad campesina’,
son producto de esas renuncias, o bellos aplazamientos que nunca duermen (o
dejan dormir).
Sin
embargo, no todo es de agradecer. La verdad es que no soporto viajar. Y evadir
viajes no me está permitido. De modo que cubrir los diálogos de paz entre el
Gobierno y las FARC en La Habana y, ahora, llegar hasta Quito para cubrir los diálogos
que se desarrollan con el ELN, no admiten duda ni cancelación de vuelos.
Esta
vez llegué a Quito convocado por la Federación Internacional de Prensa de los
Pueblos (FIPU). Llegué dominado por el veneno: asqueado del vomito de los televisores
y la sociedad que acude a la anestesia de sus pantallas, mientras contamos nuestros
muertos y los sepultamos en medio de la bulla estéril de las redes sociales.
Llegué para realizar unas pocas preguntas, atravesadas por la amargura de la muerte, el paramilitarismo y una sociedad condenada a la infamia y estupidez por los medios de comunicación. Las preguntas fueron consignadas a la delegación de paz del ELN el 19 de agosto; y ahora quedan también abiertas, más que para encontrar respuestas, para abrir el debate con un pesimismo liberador que conlleve a la paz con justicia social y derrote, algún día, al terrorismo de Estado y a los verdugos perpetuados en el poder.
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.